
LA HISTORIA DE LA CABO DEYKA QUINTERO: PASIÓN, ENTREGA Y ORGULLO POR LA VIDA BOMBERIL
Con honor, disciplina y abnegación, la cabo Deyka Quintero ha forjado una trayectoria admirable dentro del Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá. Su historia inicia un 23 de noviembre de 2013, cuando decide integrarse a las filas de la institución a través de la Dirección de Operaciones de Búsqueda y Rescate (DOEXBURE), en la Zona Regional de Panamá.
Desde entonces, su vida ha estado marcada por el compromiso y el deseo genuino de servir. Con una profunda vocación y una incansable voluntad de superación, ha sido parte activa de diversas especialidades de rescate, destacándose como miembro de la Unidad Nacional de Rescate de la Dirección Nacional de Operaciones de Búsqueda y Rescate.
La Cabo primero Deyka no solo ha enfrentado emergencias con firmeza y valentía, sino que ha demostrado que las mujeres en la vida bomberil son fuertes, capaces y fundamentales en cada operación. Su ejemplo inspira y enorgullece.
“Me siento profundamente orgullosa de ser parte del Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá. Esta institución me ha formado, me ha retado y me ha enseñado que el trabajo en equipo, la entrega y la disciplina hacen la diferencia en cada misión”, expresa emocionada.
La cabo Quintero agradece a su familia, pilar fundamental que ha estado a su lado en cada paso de este camino, y a sus compañeros de turno, clases y oficiales que han creído en ella, la han guiado y le han enseñado lo valioso que es el servicio bomberil.
Hoy, su dedicación y esfuerzo la han llevado a ser parte del equipo que representará a Panamá en el primer Congreso Internacional de Mujeres Bomberas, que se desarrollará del 23 al 26 de septiembre de 2025, organizado por el Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá.
“Este es un momento muy especial. Representar a mi país y a mi institución en un evento de esta magnitud es un honor. Las mujeres tenemos la capacidad de cumplir funciones exigentes, de liderar, de salvar vidas. Estamos hechas para servir con coraje y entrega”, afirma con orgullo.
Historias como la de la cabo Deyka Quintero reafirman que la vocación no tiene género, y que el uniforme de las camisas rojas también representa la fuerza, la pasión y el liderazgo de mujeres que marcan la diferencia.
MAF