
DE LA BRIGADA INFANTIL AL SERVICIO ACTIVO: LA INSPIRADORA HISTORIA DEL CABO PRIMERO YAIR BERNAL.
La vocación de servicio no siempre llega en la adultez. En el caso del Cabo Primero Yair Bernal, miembro del Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá, esta nació desde la niñez y floreció hasta convertirse en una verdadera carrera de vida.
Todo comenzó en 2008, cuando Jair, con apenas 8 años, ingresó a la Brigada Infantil y Juvenil del Benemérito Cuerpo de Bomberos, un programa diseñado para inculcar valores de responsabilidad, disciplina y compromiso en los más jóvenes.
Una emergencia que lo marcó profundamente fue una atendida por su abuelo, el hoy Teniente Julián Lasso, asignado en ese momento a la Comandancia. Se trató del colapso de un puente en el sector de Torrijos Carter, una tragedia en la que lamentablemente fallecieron varios niños. Ese hecho fue el primer acercamiento de Jair a la labor de los bomberos y, también, el instante en que nació su vocación.
“Desde entonces supe que esto era lo mío”, recuerda Bernal.
“Ayudar a mi comunidad es el mejor trabajo del mundo.”
Con el paso de los años, su compromiso creció. En 2011 se integró a la Banda de Música Juvenil, y en 2014 pasó a formar parte de la Banda de Cornetas y Tambores, al tiempo que se incorporaba a la Compañía Voluntaria No. 9.
El 15 de febrero de 2016, Yair dio un paso decisivo al ingresar oficialmente como bombero operativo, convirtiéndose en parte activa del equipo permanente. Actualmente, cumple funciones en el área de Control de Radio, colaborando directamente en la coordinación de respuestas ante emergencias.
Su trayectoria es un ejemplo claro del impacto positivo de los programas de formación temprana. Hoy, porta con orgullo el rango de Cabo Primero, siendo un modelo a seguir para las nuevas generaciones que ven en los bomberos no solo un uniforme, sino un camino de propósito, entrega y servicio.