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PREVENCIÓN: LUCES DE LA NAVIDAD

Ha empezado el mes de diciembre y en los hogares panameños es tradición  colocar  adornos y luces decorativas que nos recuerdan el nacimiento del niño Jesús, lo  que  multiplica el entusiasmo por colocar la mayor cantidad de luces que resalten el  “espíritu navideño”.

En el año de 1752 Benjamín Franklin descubrió la electricidad y su conductividad, a través del famoso experimento de la cometa en un temporal, y a partir de allí,  fue el primer hombre que recibió una “descarga eléctrica intencional” y por eso  hoy conoceremos que sucede a nuestro cuerpo cuando la corriente eléctrica pasa por el cuerpo, con la finalidad de ser más precavidos y así practicar las normas básicas de prevención en nuestro entorno.

Hay varios factores que juegan un papel importante a la hora de valorar los efectos de una descarga eléctrica en el cuerpo humano: la cantidad de corriente que pasa por el cuerpo (se mide en amperios), el camino que sigue la corriente, el tiempo que dura la descarga, el voltaje, la presencia de humedad en el ambiente y el estado de salud de la persona afectada.

Una persona en ambiente seco y con la piel seca, ofrece una resistencia aproximada de 100.000 ohmios. Así pues, aplicando la fórmula, si toca un cable activo y tierra, lo atravesará una corriente de 220/100.000 que da 2,2 miliamperios, una descarga pequeña que produce un ligero cosquilleo o un calambre soportable. Sin embargo, estas condiciones pueden variar de forma drástica con la humedad.

Si la persona está sudando o mojada y sobre suelo húmedo, la resistencia se reduce muchísimo, puede bajar hasta los 1.000 ohmios. En ese caso la intensidad que la atravesará será muy alta: 220/1.000 da 220 miliamperios. Esta descarga es lo suficientemente alta como para producir dolor, parada respiratoria, contracciones musculares involuntarias y, en casos extremos, la muerte.

1 mA……… Es el límite inferior de percepción. La sensación, si existe, es de un ligero hormigueo. No obstante, ya hemos visto con qué facilidad se puede aumentar la cantidad de corriente en condiciones de humedad. ¡Mucho cuidado!

5 mA……… Se siente un ligero calambre, no es doloroso pero sí desagradable. No llega a producir contracciones musculares bruscas y podemos librarnos con facilidad.

Entre 6 y 30 mA…. Se produce un calambrazo doloroso con pérdida del control de los músculos.

Entre 50 y 250 mA…. Dolor fuerte, parado respiratorio, contracciones musculares severas, si se toca un cable con la mano, los músculos contraerán los dedos involuntariamente y podemos quedar “pegados”. En casos extremos se puede producir la muerte.

Entre 1.000 y 4.300 mA… Fibrilación ventricular del corazón. Contracción muscular y daño de sistema nervioso. Muerte muy probable.

Corrientes más altas: Paro cardiaco, quemaduras graves y muerte casi segura.

Puesto que la corriente biológica de la persona es inferior a la que la está atravesando por efecto de la red eléctrica (unos 14 mA), la persona no puede ejercer la suficiente resistencia para poder abrir su mano, con lo que inevitablemente se queda rígido sin poder hacer nada porque ha perdido el control de sus músculos. Se trata de una de las situaciones más agonizantes, ya que no puedes hacer nada a menos que recibas una ayuda brusca de alguien que esté cerca de ti en algún momento.

Para evitar esto el Benemérito Cuerpo de Bomberos de la República de Panamá recomienda utilizar extensiones eléctricas adecuadas, foquitos led nuevos, no sobrecargar las regletas, no realizar conexiones descalzo, no trapear cerca de los focos navideños, personal idóneo que haga las instalaciones eléctricas, no improvisar “arañas navideñas”. Recuerde el número de emergencia es el 103.

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